Un barbero muy querido por la comunidad en Mississippi, murió de COVID-19 (coronavirus) después de continuar aceptando clientes en medio de la pandemia en curso.
Según el medio de comunicación Gossip On This, Eugene Thompson, de 46 años, murió en el Hospital St. Dominic en Jackson, Mississippi, el sábado pasado (4 de abril), menos de un mes después de dar positivo por la nueva enfermedad. Thompson, propietario de las barberías Taper Nation y Taper Nation 2, admitió por primera vez que se había enfermado en una publicación de Facebook compartida el 17 de marzo, que lo llevó a cerrar las puertas de su negocio durante el resto de la semana.
"Manténgase alejado de la gente ... lugares ... o cosas ... Me sentí un poco [adolorido] ... la fiebre estaba un poco alta, así que vine a que me revisen", escribió Thompson en ese momento. "Tapernation estará cerrado por el resto de la semana ... merecido descanso y relajación ..."
La publicación se produjo horas después de que Thompson compartiera la siguiente advertencia a los clientes potenciales que buscan recortes: “APSA: debido a coronavirus TaperNation solo aceptará clientes que SOLO reciben un servicio hasta nuevo aviso ... SO si [usted] no está recibiendo un servicio ... no vengas
Se informó que Thompson contrajo la enfermedad el 22 de marzo, lo que lo obligó a practicar el autoaislamiento para evitar la propagación del virus a otros. Después de días de luchar por su vida, murió menos de una semana después de cumplir 46 años.
"No podía levantarse y caminar hacia el automóvil, no caminar por la casa porque no podía hacerlo de todos modos", dijo la hermana Dedra Edwards a un medio local. "A las 12:22 p.m. la enfermera practicante en la UCI en St. Dominic me llamó y dijo que su corazón se detuvo y no pudimos revivirlo ".
"Nuestro último recuerdo de él es subir a la ambulancia", agregó. "No pudimos decir adiós, estaba solo, mi hermano estaba solo". Hasta el momento, Mississippi tiene poco más de 2,000 casos confirmados de COVID-19. En el momento de la muerte de Thompson, no se habían implementado órdenes obligatorias de "quedarse en casa", pero las autoridades federales han estado instando a los residentes a evitar grandes reuniones sociales desde Marzo.